Un análisis reciente sobre las reformas educativas con mejores
resultados (PREAL) establece que los tres factores que explican su éxito están
relacionados con los recursos humanos:
- seleccionar
las personas más aptas para ejercer la docencia;
- desarrollar
sus competencias y compromiso a través de una formación estrechamente
vinculada a las prácticas pedagógicas;
- y contar
con sistemas de apoyo a las escuelas para que todos los niños puedan
aprovechar los beneficios de una enseñanza de alta calidad.
Es urgente, por tanto, prestar mayor atención a la dimensión
subjetiva de los diferentes actores involucrados en los procesos educativos,
incrementando sus capacidades y motivaciones y mejorando sus condiciones de
trabajo.
Las instituciones de formación docente debieran ser espacios
participativos, interculturales y abiertos a la diversidad, formando
profesionales que sean representativos de las diferencias presentes en las
escuelas y proporcionándoles herramientas para atender a la diversidad en todos
los niveles educativos, como la utilización de un amplio abanico de estrategias
de enseñanza, la identificación de barreras al aprendizaje y la participación o
la incorporación de la cultura a los procesos educativos, entre otos aspectos.
El apoyo a los maestros principiantes, a través de docentes con mayor
experiencia, y el fortalecimiento de los centros educativos como espacios para
la formación inicial y el desarrollo profesional continuo pueden ser sumamente
eficaces para mejorar las prácticas educativas de atención a la diversidad. Estrategias
de esta naturaleza permiten reflexionar sobre las prácticas educativas y
recuperar los saberes pedagógicos, convirtiendo los centros escolares en
generadores de conocimiento “desde y para la práctica”, y permitiendo a las
instituciones formadoras contar con escuelas de diversa naturaleza que
faciliten la formación de los futuros docentes para trabajar en contextos
diversos.
Mejorar el compromiso, las competencias y condiciones de trabajo
de los docentes son medidas fundamentales para dar respuesta a la diversidad,
pero no son suficientes; se trata de una tarea compleja que requiere un trabajo
colaborativo entre los diferentes actores de la comunidad educativa (docentes,
padres y estudiantes) y profesionales de otros sectores. El apoyo abarca todos
aquellos recursos humanos que complementan o refuerzan la acción pedagógica de
los docentes para dar respuesta a las necesidades educativas de todos los
estudiantes, prestando especial atención a aquellos que más ayudas necesitan
para optimizar su desarrollo y avanzar en su aprendizaje (UNESCO). La
colaboración entre los diferentes actores es una de las señas de identidad de
las escuelas inclusivas y es clave para la construcción de comunidades de
aprendizaje. La mejora de la práctica educativa para atender a las necesidades
de todos los estudiantes hace necesaria una metodología de trabajo colaborativo,
en la que se aborden los problemas desde las distintas perspectivas que pueden
aportar los diferentes actores, estableciéndose una relación de igualdad en
cuanto al nivel de relación, pero complementaria y diferenciada en lo que se
refiere a los conocimientos y experiencia profesional de los distintos
implicados.
Del sistema educativo y las políticas sectoriales a la sociedad
educadora y el desarrollo de políticas intersectoriales
La educación escolar no puede por sí sola atender a todas las
demandas; la escuela puede enseñar valores democráticos y promover una
convivencia respetuosa, pero esto no asegura tener sociedades más democráticas
y menos violentas. Por ello hay que avanzar hacia políticas que fomenten la
responsabilidad y el compromiso social por la educación (PRELAC).
La atención a la diversidad y el desarrollo de escuelas
inclusivas requieren necesariamente una mayor articulación de los sistemas
educativos con otras instancias de la sociedad que son fuente de aprendizaje de
las personas (familia, centros sociales y culturales, etc.), así como el
desarrollo de políticas intersectoriales que aborden de forma integral la
diversidad de necesidades del alumnado. A la educación le corresponde eliminar
o minimizar las barreras del sistema escolar que limitan la igualdad en el
acceso a los conocimientos, pero al mismo tiempo es preciso implementar
políticas económicas y sociales que aborden las causas que generan desigualdad
fuera de los sistemas educativos y aprovechar los recursos de otros sectores
para garantizar el aprendizaje de todos.
En los países en los que no hay recursos disponibles, más allá de
los existentes en las escuelas, habrá que definir un sistema que
progresivamente contemple servicios complementarios que colaboren con los docentes.
A su vez, en aquellos donde exista una amplia gama de servicios habrá que
revisar su estructura y funciones para reorientarlos en la perspectiva de la
inclusión y la atención a la diversidad, asegurando que las diferentes
instancias trabajen conjuntamente para ofrecer una atención integral (UNESCO).
Al respecto, es necesaria la elaboración de planes intersectoriales en los que
se planifiquen las funciones y responsabilidades del conjunto de servicios o
instancias responsables de la educación de los niños y jóvenes en un
determinado territorio o área geográfica (Martín, E.).
Extraído de
La atención educativa a la diversidad: las escuelas inclusivasRosa Blanco
En
Calidad, equidad y reformas en la enseñanza
Álvaro Marchesi
Juan Carlos Tedesco
César Coll
Coordinadores
Me gusto mucho, esta parte. "Mejorar el compromiso, las competencias de trabajo de los docentes son medidas fundamentales para dar respuesta a la diversidad" Nos exigen, pero no nos ayudan a especializarnos, a obtener Maestrias, sobre todo en Municipios apartados en donde no hay la Estructura Academica para lograrlo. Nos dicen que el Icetex nos ayuda a financiar pero buscas y no tienes ese monton de requisitos!!! Necesitamos apoyo para capacitarnos..
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